sábado, 7 de septiembre de 2019

164. Idas de pinza

No sé por qué me empeño en escribir sobre personajes como el chino de las pipas de porcelana (ver post anterior), si en España tenemos gente de sobra a la que se le ha ido la pinza mucho más. Porque además de dedicar el tiempo a tontadas, en lugar de ganar dinero con ello lo gastan. Y encima dinero público que, dijera la Calvo lo que dijera (1) es nuestro y muy nuestro.

Probablemente, agotada la euforia del mundial, y angustiados por el hecho de de que los jugadores de la selección no pudieran ir a recoger el premio Príncipe de Asturias, a muchos españoles se les pasara por alto una noticia del sábado pasado: el pulpo Paul falleció santamente en su acuario de Oberhausen. Lo siento por el pobre bicho, pero esta oportuna muerte evitó que algunos empresarios españoles quedaran como auténticos idiotas, ya que estaban dispuestos a pagar 30.000 euros para traerse al pulpo a España.

Pero no hay forma de evitar que el alcalde de O Carballiño quede como un idiota. En su caso no hay solución. Mientras los alemanes se hubieran deshecho del cefalópodo con discreción, Carlos Montes sigue empeñado en pasar a los anales de la estupidez mundial. Acaba de declarar que quiere poner los restos del pulpo en el Museo de la localidad (2) y, lo que es peor, ha asegurado que “todavía no está programado ningún tipo de acto institucional en recuerdo de Paul”. Atención a ese “todavía”, que nos hace temer lo peor. No puede significar más que aún no se le ha ocurrido algo lo suficientemente espectacular.

Mientras Chacón procura que los funerales de los militares muertos en Afganistán tengan lugar en la casi clandestinidad, el que sea ministro de Interior en cada momento intenta que los funerales de las víctimas del terrorismo pasen casi desapercibidos y las autoridades de Castilla-La Mancha convirtieron el entierro de los fallecidos en el incendio de Guadalajara en un acto de autobombo, impidiendo entrar en él a los compañeros de los difuntos, este bobo integral quiere hacer “un acto institucional” por un bicho de acuario. ¿De verdad se le ha ido la pinza a todo el mundo o soy yo la que se ha vuelto majareta?

……………

(1) Recordad aquello de “el dinero público no es de nadie”.

(2) Debe ser un museo muy vacío de contenido para contemplar esa posibilidad.

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